Una cámara infrarroja o también conocida como cámara térmica, permite encontrar variaciones en la temperatura de objetos y maquinaria, también ayuda a identificar patrones de calor que pudieran evidenciar errores que a largo plazo pueden ser costosos e incluso afectar la producción. La imagen térmica que se obtiene a través de las cámaras infrarrojas se utiliza para el mantenimiento preventivo ya que detecta fallas que son imperceptibles a simple vista.
Ventajas de las cámaras térmicas.
El uso de las cámaras térmicas permite, entre otras cosas:
- Detectar fallas que a simple vista no se pueden ver; en la mayoría de las veces, con mucho tiempo de anticipación, evitando así que se originen fallas muy costosas en producción.
- Una vez corregida la falla, se puede hacer otra inspección para verificar si efectivamente la falla fue corregida.
- Ahorra grandes cantidades de dinero al evitar paros inesperados de producción.
- Con la interpretación de los termogramas, podemos conocer de manera precisa los problemas minimizando el tiempo que se requiere para el mantenimiento.
- Se puede programar el mantenimiento preventivo.
- Se puede determinar con gran exactitud el incremento de temperatura, conociendo así la seriedad del problema.
- Ayuda a detectar problemas sin interrumpir el funcionamiento del equipo ya que no es intrusivo.
- Detección de equipos defectuosos mientras se encuentran dentro de garantía
- Se pueden evitar incendios y accidentes